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Han estado preguntando por Ross, así que hoy vengo a contarles que de inicio, tenía frío todo el tiempo. Hace un par de semanas, a mitad del verano, al fin el solecito la calentó ¡hasta en los pies se pone bloqueador! porque se le quedan marcadas las sandalias.
La familia es buena, decente y educada. Respetan los horarios de Ross y ella se ha acomodado bien al estilo de vida que llevan.
Ahora que son vacaciones, está a cargo de los tres niños (varón de 8 años, niña de 6 y niña de 3) desde que despiertan hasta las 5.30 de la tarde. Tienen muchas actividades y los dos niños mayores a veces pasan el día y duermen en casa de la abuela materna. A ratos la sacan de quicio, sobre todo cuando van amiguitos a jugar, pero son pocos (los ratos) (bueno, también los amiguitos) y pasan rápido.
Le gusta mucho la ciudad y está a gusto con el trabajo que desempeña. Una de las cosas que la tiene encantada, es que manejando se mueve como pez en el agua (lo cual a su madre le da "un cierto temor).
La semana pasada estuvo (con la familia) de vacaciones en un lago en Michigan y la próxima visitarán a los abuelos paternos en las Vegas.
Sale de vez en cuando con otras "au pairs" que viven cerca, sin embargo, no ha encontrado personas de su edad con las cuales coincida en gustos e intereses, cosa que no le preocupa, pues a fin de mes, pasará una semana con ella, una de sus "amigas de siempre" y después, otra campechanita también estará en Chicago (ya están viendo sus boletos para el concierto de Lady Gaga).
Tiene planes para en septiembre, cuando los niños regresen a la escuela, empezar clases de fotografía y dice que también quiere ir a inglés, ya que es en la universidad y sin costo. Recuerdo que nunca quiso aprender otro idioma y en específico, al ser obligada por sus padres a estudiar inglés, se rebelaba y decía berrincheando "nunca lo voy a aprender" negándose en rotundo y ahora -me río sola- decide ir a clases "porque se da cuenta que le falta gramática".

Aún no sabe que hará (por consiguiente, no sabemos qué haremos) en diciembre, pues solo cuenta con una semana libre. Deshoja la margarita: ¿iré a campeche? ¿acepto los planes de mi amiguita y nos vamos a conocer Los Angeles? ¿paso esa semana en New York?
Está contenta, conociendo y aprendiendo. Yo no puedo pedir más. Me hace felíz saberla bien.

Las fotos son de las niñas que cuida. La pequeña es una ternura a la que le gusta salir a la calle arreglada... pide siempre sus collares y lentes. A la mayor no le gusta ¡ni peinarse! pero es buena para los "business" y siendo niña americana ¿cómo no iba a vender limonada, en vacaciones, en la puerta de su casa? -Dice Ross que Lily sacó ¡buen dinero! que por cierto, luego donó (aconsejada=obligada por sus papás) a la iglesia.