sábado, 30 de enero de 2010

Ley de vida

Cinco canas en la sien, es lo que me han dejado las decisiones que está tomando mi hijo
-expresó la amiga-.
Parece ser inevitable que los hijos, en algun momento o en muchos, nos saquen canas y si nos va bien, serán de esas bellas, gris/plateado que tan sofisticadas se ven y hablan de nuestra experiencia de vida y nuestro suave y sosegado acceso a la sabiduría; por lo general son gris deslavado, llenas de tristeza, o verdes, matizadas de disgusto y rebeldía. Es que los queremos tanto, que deseamos aprovecharan nuestra experiencia, que aprendieran de nuestros golpes y errores, que usaran nuestro aprendizaje para que su caminar sea más suave y fluido y ellos, necios, se empeñan en vivir sus propias experiencias ¡pareciera que disfrutan sus propios golpes! y que están empeñados en cometer sus propios errores...
Hasta hoy, es ley de vida que cada quien aprenda en sí mismo.
Como madres, nos cuesta mucho -pero es bueno- hacerse a un lado y permitirles vivir la consecuencia de sus acciones y decisiones. Es el mayor regalo que podemos hacerles: Confiar en que les hemos dado las herramientas suficientes y dejar que aprendan a usarlas. De cualquier forma, seguiremos estando ahí, como red de seguridad, para que sus caidas sean "en blandito".
A mi amiga: Te acompaño con comprensión y si quieres ¡también te acompaño a comprar la pintura para el pelo!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

R.S. Patty, qué bueno que hay amigas como tú, que están ahí, siempre......

Anónimo dijo...

Tia se lee tan cierto el escrito, todavia no he llegado a esa etapa pero estoy justo en el momento que ya he comprendido tanto eso que ahora cada consejo que mi mama me da lo tomo mucho en cuenta pues resulta tan cierto todo lo que me dice, que miedo cuando llegue a la etapa que arriba mencionas tiaaaaaaaaaa, pero espero tener el criterio y seguir contando con ustedes para pasar con pasciencia esas etapas.

Aproposito YA TENGO CANAS y todavia no tengo adolescentes, como estare cuando los tenga????

Besos a todas¡¡¡¡¡
ch

Patricia dijo...

Hola bonitas:
Para algunas personas, yo estoy "ahí", pero lo realmente bueno es que siempre hay alguien, no importa quien. El estar solos no es real.
CH: No hay nada que temer. Los cambios, el crecimiento, el elegir el propio camino, son parte del proceso natural. Hay que confiar. Y por lo de las canas, el lado positivo es que desde ahora puedes empezar a pintarlas (ji).
Besos a las dos.